El papá de Lina [parte 1]

Durante mi secundaria tuve una relación estrecha de amistad con Lina, una compañera con la que me la llevaba muy bien, incluso en lo académico para los trabajos. Ella era muy especial conmigo , es más , creo que hasta le gustaba , pero después de compartir tanto, al parecer se le fue ese gusto.

Como ya mencioné, con Lina me reunía para elaborar trabajos académicos y cuando era así , el lugar preferido era la casa de Lina, pues se lucía atendiendo con buena comida y refrigerios.

Para aquel entonces yo no tenía tan despierto esto de fijarme en hombres, porque andaba en negación, pero por allá en el fondo algo salía. Para ese entonces, tuve un destello de deslumbre con el papá de Luna. Era un señor bien puesto , bien puesto , pero lo que llamaba la atención de él era su voz tan varonil. 

Debo confesar que aparte de verlo en pantaloneta corta y camisolas ripo esqueleto cuando yo iba , lo quería más me gustaba era cuando élmw daba una palmada en la espalda y me saludaba por mi nombre. Me daba un corrientazo, pero yo mismo me reprendía por dentro.

Digamos que el papá de Luna se convirtió en una fantasía , pero por su vozarrón tan varonil y ese porte decía caballero.

El final de la secundaria llegó para mi y eso trajo como consecuencia el distanciamiento con mis compañeros ; cada quien tomó su rumbo , así que ya no volví a casa de Lina, por ende a su papá tampoco le volví fría a ver en pantaloneta ajustada.🙊

Un chat particular

Hace algunos años existía un chat en los dispositivos celulares con el operador Tigo , una sección llamada MUNDO TIGO. Sé que muchos saben de qué hablo a la perfección, pero como seguro habrá quienes no saben qué era, pues se los explicaré rápidamente. Era una zona de entretenimiento que contenía desde  Horóscopo , chistes...hasta chats, categorías de chat. Un día descubrí uno de esos chat y solo entraba a leer todo lo que allí publicaban: anuncios de venta de artículos, citas, búsqueda de pareja , sexo y de cuánta perversidad.

Una madrugada se me ocurrió subir un anuncio el uno de los chats general, fui muy explícito con mi anuncio y sugestivo. El anuncio fue algo así “Soy gay inexperto, me gustaría chupar mucho a un macho” anexé mi número e inmediatamente empezó a sonar mi celular con llamadas entrantes de muchos números, me daba algo de vergüenza contestar , respondí una llamada y me preguntó un guarda de seguridad que si yo era travesti o trans, que buscaban eso, así que me colgó en cuanto le dije que no.

La segunda llamada que respondí fue un tipo insultando , diciéndome “MARICÓN , VE A METERTE UNA VARILLA CALIENTE POR EL CULO” y pues bien, hasta ahí , nada del otro mundo. Ya iba a dormir cuando otra llamada entró, yo respondí y lo primero que escuché fue una voz muy masculina preguntando “¿Dónde estás? Eres el del anuncio del chat ¿no? ¿Te quieres pegar como ternero?”

Yo me reí tímidamente y le dije que estaba en Barranquilla. Aquella voz profunda dijo llamarse Enrique y estar en Cartagena. Así que lo lamenté, sin embargo Enrique me dijo “soy de Barranquilla, trabajo en Cartagena y constantemente voy, porque allá viven mis hijas. Iré en Semana Santa, así que cuando vaya te llamo pa’ que me ordeñes”.

No pensé tanto en esa posibilidad y decidí no ponerle empeño.

La llamada de Enrique 

Semana Santa llegó y el miércoles santo me llamó Enrique y me puso en aviso que estaba en Barranquilla, estaba en casa de su madre y estaba arrecho, pero que primero nos viéramos porque a él le daba algo de tensión pensar poner a chupar a un desconocido y a otro hombre.

Fijamos un lugar y hora para vernos ese mismo día. 

4:30P.M fue la hora en una cancha de fútbol, que por cierto, como suelen estar las calles en plena Semana Mayor, todo estaba solo. Me dijo cómo iría vestido y mencionó llegar en bicicleta.

Y bien. Muy puntual vi acercarse a un hombre con las características que me había dado Enrique, el hombre del vozarrón bello, pero mientras se iba acercando su rostro se me hizo conocido...

Yo le di un nombre falso desde la llamada y él me saludó. 

Nos sentamos en la grada a charlar y mientras él hablaba , en mi mente decía yo “¿De dónde conozco a este man ?” Enrique me convidó caminar por una zona que estaba más sola para ponerme a hacerle sexo oral. dijo:” —Estoy arrecho (excitado) vamos dónde hay una construcción abandonada y ahí me la chupas”.

Antes de llegar al lugar nos detuvimos debajo de un palo de mango a agarrar unos frutos  para despistar porque había una moto de policía con dos agentes. Pero esos agentes como que nos vieron sospechosos y con cara de malandro, que se acercaron a requisarnos y posteriormente a pedir nuestros documentos. Cuando los agentes verificaron por el aparato ese dónde aparece si un ciudadanos tiene asuntos pendientes con la justicia , entregaron la cédula de Enrique y lo llamaron por su verdadero nombre. No se llamaba Enrique, obvio, pero me sorprendí que “Enrique” , el macho que venía diciéndome que me pondría a tragar leche , resultó ser el papá de Lina, mi ex compañera del colegio.

Y es que no, yo no lo veía hacia años y estaba algo cambiado. Bueno, no solo él, yo también había cambiado físicamente.

Sin embargo ya sabiendo yo quién era él, no le dije nada y seguimos buscando un lugar. Finalmente vimos una casa cubierta con tela verde de plástico, estaba oscuro y me dijo : “—Entremos rápido ahí que no nos vean”.
Era una casa en construcción y afortunadamente para nosotros no había nadie allí. “—Pilas, a lo que vinimos porque no estamos pa’ demorarnos—“ Tomó mi mano y me la puso en su entrepierna diciendo “—Siente cómo la tengo—“ bajó un poco su jean y al ver su miembro me sorprendí porque era grande y grueso, me arrodillé en una pila de arena para hacerle sexo oral. Lástima cuando estaba chupando sus testiculos y le hacía movimientos circulares con la punta de mi lenguas en su glande (cabecita de la verga) eyaculó cuando apenas empezaba a hacerle sexo oral. Allí en la arena cayó su semen, salimos inmediatamente y me iba diciendo que la ansiedad y adrenalina por estar ahí y podían  descubrirnos lo había hecho eyacular rápido.

Antes de despedirnos cuando íbamos caminando, yo le dije “—¿No te acuerdas de mí?—“
Él cambió de semblante y respondió diciendo que no, que si acaso nos conocíamos. Yo le dije mi nombre real y le dije que había sido compañero de su hija Lina.

Quedó callado y tragó en seco. Se subió en su bicicleta y dijo “—Te agradezco seas prudente, tengo mucho qué perder—“
Le dejé claro que sería incapaz de hacer algo así, pero él algo asustado se marchó.

Quizá debí haberme quedado callado.😔

CONTINUARÁ...