Sexo en la calle con Daniel

Anoche les conté en un tuit que estuve con un chico de 19 años y de inmediato muchos de mis seguidores exigieron relato, al ver que no compartí evidencia de dicho encuentro, así que aquí voy con mi relato corto, hoy día festivo.

Hace un año yo tenía una cuenta en Facebook parecida a la que manejo en Twitter, pero no tan explícita, solo publicaba fotos en lencería y así tenía muchos contactos, con el prototipo que me enloquece.

En aquella cuenta diariamente recibía solicitud de amistad de muchos machos... un día acepté entre tantas solicitudes a Daniel, un chico moreno, alto, de aspecto humilde, de esos hinchas del equipo de fútbol Junior de Barranquilla. Tenía un mensaje privado en Messenger de él, donde me preguntaba dónde vivía y pedía mi número de celular.

Me trataba en femenino y me decía cosas halagadoras como si hablara con una chica; yo le aclaré que aunque parecía, no era chica, a lo que él dijo que no importara. Entonces ahí sí fue más directo y me pidió nuevamente mi número celular y una foto mostrándole mi culo.

Intentábamos cuadrar un encuentro, pero no ajustábamos los tiempos. Ya me había mostrado su verga y TREMENDA VERGA se manda el niño, de esos tamaños que estimulan.

Cierto día entré a mi cuenta Facebook y me notificó un mensaje que mi perfil había sido suspendido. Me dolió porque allí ya tenía trabajados a un grupo de machos a punta de fotos en lencería.
Lamenté eso porque había perdido el contacto de Daniel, aunque él tenía mi número pero nunca había escrito.

Ya ha pasado aproximadamente un año que no tengo puti-cuenta en Facebook y este sábado recibí un mensaje en mi WhatsApp con un “Hola”. Pregunté quién era y me respondió “¿Tú eres Bree?” Yo respondí con un emoji pensativo 🤔, a lo que él respondió con una foto de su verga que inmediatamente me refrescó la memoria.

Bree: hey, apareciste ¿dónde estabas?
Daniel: nada, no tenía celular y hasta ahora vuelvo a tener uno... llega al CAI del parque Las Nieves
Bree: oye, pero mira la hora (era la hora 10:20pm)
Daniel: ¿Puedes o no?
Bree: vale, deja me alisto y salgo...

Me hice un corto lavado y cuando iba de salida revisé el celular y me decía que ya no, que mejor al día siguiente, quedé súper aburrido.

Daniel: te demoraste mucho, mejor vente mañana, yo te aviso. Mándame una fotico mostrándome el chicorio (el ano)

Yo le envié un corto video mostrándole culo y...

Daniel: joda, se te ve ese culito limpio y apretao’ como pa darte mondá (verga)

En el video yo bailaba un reguetón que sonaba cuando posaba para el video que le envié y me dijo:

Daniel: si me bailas así, y me pones el culo cerca de la verga te ganas tu pichera

Así chateamos “hot” por un ratico más y nos despedimos.

Anoche (domingo) tipo 07:15pm recibí un mensaje de Daniel y me preguntó qué estaba haciendo, me dijo “Llega al CAI de las Nieves” (una estación de policía, para los lectores que no son de Colombia)

Le pedí una hora para alistarme y quedamos en vernos a las 8:30pm en el lugar que me citó, que es relativamente cerca de mi casa.

Él me pidió llevar puesto un hilo rojo, así que le complací llevando debajo de mi jean un hilo, me vestí con algo oscuro y me puse una gorra. Salí sin celular, porque esa zona es algo insegura.

Llegué al CAI de las Nieves y como es de esperarse, como la estación de policía queda en un parque, estaba lleno. Lo vi recostado a un árbol poco frondoso, empuñó su mano y me saludó chocándose con mi puño.

Me indicó que entraríamos  un solar que estaba en la próxima cuadra, justo al lado del colegio Santa Teresita, él se dirigió hacia allá, dejé transcurrir 5 min y luego entré yo.
Daniel tenía una sudadera gris con un suéter blanco, yo me acerqué y en el punto donde nos ubicamos  nadie nos veía.

Él se acariciaba la verga por encima de la sudadera y fue cuando yo eché mano para agarrársela...
Daniel agarró mis nalgas y yo me desabotoné el jean para dejar mis nalgas al descubierto para que me viera el hilo rojo. Cuando me vio así, me agarró por la cintura y se puso detrás de mí para rozarme la verga... empecé a bailar suavemente para rozar mi culo con su verga y ya lo sentía duro. Me respiraba en los oídos. Créanme que con nadie había tenido un morbo previo al sexo tan rico como con Daniel.

Me agarraba con sus manos las nalgas y yo buscaba acomodo en su verga. Con un dedo trataba de abrirme y me acomodó para puntearme con su cabecita de la verga. Me corta la respiración recordar ese momento tan excitante. Daniel se volvió a poner detrás de mí y me abrazaba por la cintura, yo extendí mi mano izquierda para acariciar su cabeza y su cabello... me respiraba en el cuello y ahí fue cuando volteé, me agaché y chupé verga con tantas ganas, que no quería terminar. Mientras lo mamaba, él me metía el dedo y eso como me fascina.

Me agarró por los brazos, me levanté y ahí me puso contra la pared, yo me puse el suéter amarrado con un “moñito” para que no estorbara. Saqué el condón, se lo puse y créanme, le quedaba pequeño ese condón, es que son 20cms. No llevé lubricación, así que me dolió tanto el culo en la primera clavada, que sentí un calambre horrible. Le pedí que la sacara y así fue, le llené el condón de salivas y ahí fue cuando entró toda esa exquisitez de verga... él me agarraba por el cuello, teniéndome contra la pared y allí mi culo fue suyo, me daba despacito, se movía, me embestía... tanto fue el trajín que me raspé el abdomen con el muro rústico. Al terminar, nos pusimos a charlar sobre el tiempo que llevábamos sin hablar, me dijo tenía celular porque su tío había muerto y él se quedó con el equipo. El apellido de Daniel es poco común y es el mismo apellido de unos sobrinos míos. Así que yo le pregunté si tenía un familiar mencionando el nombre del esposo de mi hermana y me dijo que sí, le mencioné a mi hermana y dijo que sí, que eran sus tíos 🙊

Daniel: ¿Por qué? ¿Los conoces?
Bree: es que tu tío es marido de mi hermana
Daniel: ¡¿QUÉEEEE?!

Yo me reí y concluimos que el mundo es un pañuelo. Salimos de ahí, cada uno por su lado. Mejor dicho, me comió un sobrino de mi cuñado. ¡Qué exquisitez!

-FIN-



Si te gustó este corto relato, házmelo saber, así me animarás más a compartir estas aventuras.

Gracias por tu tiempo... Bree.